domingo, 12 de febrero de 2012

Ciega, pero no manca




Ni apruebo, ni respeto, ni comparto,... ni.
    Los ciudadanos hoy están divididos. Unos se frotan las manos de felicidad y otros compungidos entornan los ojos con tristeza. Unos piensan que la verdad ha triunfado y otros que la mentira ha vencido. Unos se alegran de que Camps sea declarado inocente y otros se lamentan de que Garzón lo sea como culpable, mientras, Pinochet y Franco desde el infierno brindan con sus demonios por la justicia española. Y en este otro infierno, nuestro mundo, al mismo tiempo, todos los condenados por dicho juez y los que estaban pendientes de  serlo, brindan unánimemente a la sombra o cara al sol. En otros tiempos, otros jueces representando también a la Justicia, condenaron e hicieron cumplir condena por unanimidad a ciudadanos culpables que con el paso del tiempo, otra nueva Justicia declararía inocentes. Los jueces evidentemente, se equivocan más veces que aciertan, como todos nosotros, unas veces a sabiendas y otras porque también son humanos y tienen su corazoncito. En este caso los 7 magníficos sabrán porqué se han equivocado, o tal vez no, pero es altamente sospechoso que un gremio en el que nunca hay unanimidad, en este caso concreto la haya habido. Voces tertulianas se escuchan afirmando con rotundidad que 7 grandes jueces no pueden estar unánimemente equivocados. Que se lo pregunten a los que formaron parte del ya extinguido T.O.P (Tribunal de Orden Público) cuando extendían condenas para ser ratificadas por el innombrable. También es cierto, o ellos –los de ahora– sabrán si lo es, que no todos se nutren de la misma ideología. Sería demasiado casual, porque casualmente las ideologías representadas por esta alta institución llamada suprema, se reparte entre los dos también llamados grandes –por el número de votos– partidos que nos gobiernan alternativamente desde los albores de esta nuestra democracia; y que en este caso ambos tenían sus reproches que hacer, guardado en sus corazoncitos, respecto al juez-estrella. El ciudadano en el fondo sabe bien que la Justicia es una pantomima en la forma que en algunas ocasiones no yerra en el fondo. “Juicios tengas y los ganes”, decía el saber popular parodiando una especie de lotería en la que se nombra inocente al que le toca el “gordo”. Es realidad que seguimos rigiéndonos básicamente por el derecho romano, aquel que crucificaba a los rebeldes por serlo. Por eso nunca fui amigo de jueces, ni siquiera de Salomón, el paradigma de la justicia ciega, ese rey que estuvo dispuesto a dividir el cuerpo de un recién nacido como si de un cochinillo de Segovia se tratara. El envite le salió bien, igual que a Cándido le salían los cochinillos del horno en Segovia, pero si no hubiera sido así, no creo que ni siquiera hubiera pestañeado por ello. Así es la Justicia, la buena y la mala, para bien y para mal de los juzgados que somos el resto, los anónimos, excepto en ocasiones excepcionales como ahora, en la que se juzga a si misma representada por alguien del gremio confirmando lo dicho. 
    Siempre me ha aterrorizado que un individuo aparentemente como nosotros, por ejemplo el vecino del 1º que también es juez y que hizo unas oposiciones con tesón para ganarse la vida, pueda decidir sobre la de los demás solo por haber obtenido tan deseada plaza. Tampoco debemos olvidar que la justicia se ha ejercido siempre desde el poder, desde cualquier poder, algo, poco, o nada legitimado, daba igual, y muchos representantes de la misma en ocasiones históricas, desde Roma hasta hoy, pasando por el III Reich y Stalin, han pasado también de una legitimación a otra como el que juega al juego de la oca. Una de las mayores tonterías que se han dicho nunca, es esa de que “la Justicia es igual para todos”, porque la Justicia podrá ser ciega, pero desde luego no es manca.

viernes, 3 de febrero de 2012

¡Albricias!


  Gracias señor Rajoy por despolitizar al fin la justicia, haciéndola más conservadoramente corporativa. Así evitaremos juicios múltiples a jueces por buscar la verdad y veredictos erróneos de jurados encontrando la mentira. Tal vez algún día cercano, durante su actual periodo de gobierno, la clase política tome nota y decida votarse también corporativamente a si misma, librando de ese deber a los ciudadanos y perpetuando con ello a su partido mediante el apoyo de una mayoría absoluta estable. Enhorabuena añadida por crear un canon para los recursos judiciales, de esa manera la mayoría de los ciudadanos que antes recurrían no gastarán ahora lo que no tienen, contribuyendo con ello a reducir el déficit que los políticos crearon. La minoría restante hará muy bien en tirar su dinero intentando demostrar su no culpabilidad. 
    
    Gracias por cambiar la asignatura de “Educación para la ciudadanía” por la de “Educación cívica”, de título más corto y más acorde a los deseos de la Conferencia Episcopal. De ahí al “Catecismo” que aún es más breve y a la fe ciega, tan solo resta un paso. Los hombres y mujeres del futuro se lo agradecerán movidos por una buena educación cívica adquirida. Felicitaciones complementarias por favorecer a la ONG de Dios mejor subvencionada, para que pueda seguir distinguiendo entre el bien y el mal, tanto en política como en sociedad, luchando en cuerpo y alma hasta conseguir la penalización total del aborto derogando la "Ley de interrupción voluntaria del embarazo" y prohibiendo el día antes para erradicar la píldora del día después.
    
    Gracias por promover una nueva y muy eficaz reforma laboral, más acorde a los gustos de los empresarios. Quizás algún día no lejano, el trabajo y el despido nos hagan más grandes, más libres y más delgados. Inteligente medida de austeridad también, congelar o bajar los salarios de los funcionarios aumentando sus horas de trabajo, consiguiendo con ello un incremento en la productividad sin mermar el sueldo de María Dolores de Cospedal, que incluso dispone para darlo a conocer, de una página muy seguida en facebook donde regala un precioso vídeo. Por no quedarse atrás, la alcaldesa de Madrid acaba de hacer unas declaraciones para  abrir boca, promoviendo la participación social, en un intento de sustituir la contratación municipal para asistencia social y bibliotecas, por el voluntariado a fondo perdido tras los recientes despidos de interinos.























    


    Gracias femeninas por tratar de dignificar a la mujer aumentando su cuota de participación en el poder, con ejemplos a seguir como el de la vicepresidenta Sáez de Santamaría, las alcaldesas de Madrid y Valencia, Ana Botella y Rita Barberá respectivamente, o la presidenta de Castilla la Mancha antes nombrada. Si perseveran, cuando sean mayoría en las filas del partido, tal vez consigan erradicar el machismo de raza que aún pervive entre las mismas.
  
    Gracias de nuevo por trabajar codo con codo con Artur Mas en la búsqueda del copago en Sanidad, batalla que tienen perdida los pacientes. Con ese re-pago, cada uno de nosotros seremos partícipes de nuestra propia salud, evitando un exceso de medicación a cambio de tisanas y ahorrando más para gastar lo mismo que antes, cuando las consultas eran gratuitas pero pagadas por nosotros. El eslogan adoptado por ustedes dos y publicitado en TVE a través de un micrófono abierto por la oposición: “Vivo en el lío, ...yo también”; abre futuras perspectivas de colaboración, unidos y en convergencia.

    Gracias por contener su orgullo patrio cuando ríe a carcajadas los chistes malos de la señora Merckel sin traductor, poniéndose a su servicio como un fiel caballero español para ofrecerle el déficit más deseado por ella, ejerciendo para tal fin el poder con mano firme, sin que le tiemble esa extremidad por los recortes obligados en dicho empeño.


    Gracias vitalicias por restaurar la cadena perpetua, aunque sea “light” o revisable antes de la muerte del objeto de la misma, para dar a los malos su propia medicina. Con suerte y resolución tal vez llegue algún día a reinstaurar también la pena de muerte revisable no solo para los toros, aunque para ello tenga que modificar la Constitución y la Fiesta Nacional.


    Y gracias finalmente por darnos motivos para criticar a un gobierno constructivo ahora que ya empezábamos a estar hartos de criticar a uno destructivo.


    Corolario: Así como está demostrado científicamente que Dios existe porque tantos creyentes no pueden estar equivocados, usted también debe de tener toda la razón ya que tantos votantes del PP tampoco podrían estarlo, ¿o no?